EL CHAQUÉ, UN OUTFIT MUY EXTENDIDO EN CEREMONIAS
Es el traje de máxima etiqueta en las bodas que se celebran durante el día, aunque se ha consolidado su uso en bodas de tarde.
Lucirlo de una manera perfecta es saber cuándo llevarlo y elegir el modelo más acorde a la ceremonia y estilo personal.
A día de hoy, aunque se mantiene el uso del chaqué tradicional, éste se ha actualizado con un nuevo modelo de levita más corta y pantalón más entallado, denominado chaqué italiano o semichaqué.
El chaqué y el semichaqué se componen de tres prendas principales: Levita, pantalón y chaleco.
LEVITA:
La levita es una chaqueta o saco con corte recto y un solo botón.
La levita del chaqué tradicional tiene la solapa larga (hasta las corvas) y un faldón de puntas semicirculares abierto por el centro.
Su color suele ser negro, gris marengo o gris claro, aunque a día de hoy se pueden encontrar en otros tonos monocolor como el azul marino o noche.
La levita del semichaqué (también llamada por extensión semilevita) es más corta que la del chaqué tradicional y su diseño se basa en colores vivos como el borgoña, el azul tinta o el verde botella, siguiendo las últimas tendencias.
Según el protocolo, una consideración a tener en cuenta a la hora de vestir un chaqué perfecto, es que el botón de la levita debe ir siempre abrochado y únicamente puede estar desabrochado en el momento que se sienta en la iglesia o a comer.
Así mismo, es importante saber que, al igual que ocurre con los demás trajes de ceremonia, el protocolo no permite quitarse la levita en ningún momento durante la misma.
CHALECO:
Se trata de un chaleco que puede ser recto o cruzado de tres o más botones.
El último botón del chaleco puede ir desabrochado en función del diseño de este.
El chaqué tradicional se viste con un chaleco de color gris, aunque actualmente lucen una variedad de tonos de chaleco, sobre todo con el semichaqué.
PANTALÓN:
El pantalón del chaqué tradicional suele ser gris o negro, liso o con delgadas rayas verticales, con un corte regular fit.
Sin embargo, hoy en día, se puede vestir un chaqué tradicional con un pantalón slim fit, siendo este corte el que caracteriza también al pantalón del semichaqué.
COMPLEMENTOS
Además de esta tres piezas clave, el chaqué y el semichaqué se lucen con complementos tales como:
- El zapato inglés por excelencia, elegante y formal, tipo oxford, de cordón cerrado, desde el diseño más sencillo al mas ornamental, en función de la estética del outfit.
- La camisa, que ha de ser blanca, de cuello rígido o inglés y con doble puño para gemelos.
- La corbata es de uso obligatorio.
- El uso de gemelos, así como la flor o pañuelo en la solapa de la levita, son opcionales.
- Sombrero y guantes son de uso más ocasional.
” Un buen chaqué llevado con clase y estilo propio es siempre una apuesta segura, respetando los convencionalismos principales”
CONVENCIONALISMOS
Además de los detalles de estilo ya citados en cuanto a las prendas y complementos, existen unos convencionalismos muy importantes sobre el uso del chaqué en una boda.
Según el protocolo, si el novio lleva chaqué, los testigos y padrinos deberán hacerlo de igual modo.
Lo mismo ocurre en el caso contrario, si el novio no lo llevara, nadie podría hacerlo.
Es aconsejable diferenciar el color del chaqué del novio del de los acompañantes e invitados.
Hay muchos novios a los que les gusta que vayan con el mismo chaqué pero distinto color de chaleco y corbatas, llevando todos los testigos el mismo color, distinto al del novio.
UN POCO DE HISTORIA
Los orígenes del chaqué se remontan al SXIX, cuando comenzó siendo una indumentaria propia para montar a caballo en la Corte Británica, de ahí que sea abierta la parte trasera de la chaqueta.
La imagen elegante que transmitían los caballeros ingleses montados en sus caballos, conllevó a que comenzara a usarse el chaqué en bodas y eventos oficiales, introduciendo el uso del chaleco.
Es uno de los trajes más usados en todas las zonas geográficas del mundo.
Ha heredado el nombre de “traje de pingüino” del Frac, traje de máxima etiqueta de noche, debido al parecido de su cola.
Gracias al desuso del Frac, traje de máxima etiqueta por la noche, el chaqué se ha consolidado también para bodas de tarde-noche.
En la actualidad, el diseño del chaqué se ha ido adaptando a las nuevas tendencias, dando como resultado el uso del pantalón slim fit, aunque aún se demande el regular fit.
Fruto de las vanguardias de la moda es el patrón de levita más corta y entallada que, junto al pantalón ajustado, se conoce como semichaqué o chaqué italiano.
“Ahora, a lucir el chaqué perfecto”